CREAR REDES DE INVESTIGACION EN LOS PAISES EN VIAS DE DESARROLLO ES OTRA HISTORIA

Por Daniel Pimienta, Director del Proyecto REDALC, Unión Latina, Santo Domingo, correo electrónico:[email protected]

RESUMEN

El siguiente artículo presenta un conjunto estructurado de pautas para diseñar y operar redes de investigación en los países en vías de desarrollo. La metodología propuesta es el resultado de una serie de estudios y experiencias piloto llevados a cabo en América Latina desde 1989 (Proyecto REDALC). En la introducción describiremos el modelo subyacente y los factores que han determinado el éxito de las redes de investigación creadas en los países industrializados. A continuación, haremos una comparación con la situación de los países en vías de desarrollo, que ha conducido a adoptar un punto de vista diferente, y demostraremos, a través de una lista de actividades relacionadas con la creación y operación de redes, que la mayor parte de las tareas a realizar son más de carácter administrativo que técnico. Propondremos varias soluciones estructuradas en cuatro niveles jerárquicos: institucional, organizativo, financiero y técnico. A cada nivel de actividad va asociado un conjunto de líneas directivas específicas. Por último, daremos algunos principios que han sido la clave del éxito de proyectos concretos tales como la Red Científca Peruana o la Red Dominicana de Intercambio para el Desarrollo.

PALABRAS CLAVE

Redes académicas y de investigación, países en vías de desarrollo, América Latina y el Caribe, metodología.

I - INTRODUCCION

Los típicos ejemplos exitosos de creación de redes han demostrado la indiscutible superioridad del modelo ascendente (bottom-up) en el proceso de diseño. Tradicionalmente, el desarrollo de un núcleo de usuarios se ha ampliado paulatinamente hasta desembocar en una red de alcance nacional. Siempre se ha considerado que el mecanismo que hace posible tal crecimiento es algo completamente natural. Sin embargo, entre otros, hay un pequeño detalle por el cual no siempre se puede transferir dicho modelo ascendente (bottom-up) de los países industrializados, en los que demostró su eficacia, a los países en vías de desarrollo: el dinero.

ASPECTOS FINANCIEROS DE LAS REDES DE INVESTIGACION

Basta con analizar los factores de crecimiento del modelo EARN/BITNET para convencerse de que, por dondequiera que se mire, el dinero es imprescindible:

a) dinero que invirtieron los grandes constructores de equipos informáticos, como IBM o DEC, ya que, durante los primeros años, no ofrecieron ni los equipos (terminales o microcomputadoras) ni las facturas de las telecomunicaciones,

b) dinero que invirtieron los Gobiernos para seguir financiando parte de la infraestructura de telecomunicaciones,

c) dinero obtenido gracias a las suscripciones de las instituciones de investigación,

d) y tal vez también, en el futuro, dinero que esta últimas tendrán que destinar al pago de las cuentas de las redes de transporte que cuentan cada vez con menos subsidios...

Pero, desde luego, el dinero no es todo.

OTROS FACTORES CLAVE DEL EXITO DE LAS REDES EN LOS PAISES DESARROLLADOS

El crecimiento de las redes de investigación estuvo determinado por factores conexos tales como:

la existencia de infraestructuras nacionales de telecomunicaciones de buena calidad,

un alto nivel de organización y coordinación en las instituciones de investigación (en general, universidades),

la capacidad de las instituciones de investigación para negociar con los industriales del sector informático,

la existencia de pioneros capaces de concebir modelos de redes, crear las condiciones necesarias para que éstas nazcan, crezcan y se desarrollen sin interrupción.

Al considerar estos factores, los diseñadores de redes llegaron a la conclusión de que el modelo ascendente (bottom-up) de tipo "práctico-realista" debía prevalecer sobre el modelo descendente (top-down), "teórico-planificado".

Este último pudo haber atraído más a los arquitectos de redes, dada su experiencia profesional. Sin embargo, se vieron en una situación en la que se hallaban a la vanguardia en comparación con los que elaboraban las normas de comunicación, lo cual los alentó para seguir haciendo camino y adoptar una actitud de avanzada (high technology).

Los únicos puntos desfavorables en el auge de las redes de investigación son una consecuencia lógica de una situación en la que han primado los aspectos tecnológicos:

falta de estándares y normas,

poca consideración del usuario final en la toma de decisiones,

escasos esfuerzos para estructurar aplicaciones.

ADAPTACION DEL MODELO A LOS PAISES EN VIAS DE DESARROLLO

Poner en duda la validez obvia del tradicional modelo ascendente (bottom-up) va más allá de los límites de este artículo. No obstante y si bien compartimos la opinión general sobre este aspecto, conviene llamar la atención del lector sobre el riesgo de copiar sin adaptación alguna, en los países en vías de desarrollo, un modelo tan propio del mundo industrializado.

Por un lado, la falta de recursos financieros puede impedir el mecanismo natural de crecimiento de las redes desde una aplicación incipiente hacia una solución a nivel nacional. Por otro lado, independientemente del dinero y del tiempo transcurrido desde el comienzo de la instrumentación de la tecnología de redes (¿cabría construir las redes de hoy como las de hace diez años?), hay otros motivos por los cuales las soluciones tendrían que ser diferentes, tal como se verá más adelante.

Además, los diseñadores de redes del primer mundo no tendrían que quedar indiferentes ante el surgimiento de las redes de investigación en los países en vías de desarrollo sino que, por el contrario, aun cuando su interés primordial sean los canales de banda ancha y las "aplicaciones" (en el sentido de la palabra dado por la arquitectura OSI), podrían aprender de las experiencias realizadas en estos países para su propio beneficio.

En efecto, hoy en día, van apareciendo signos claros de una evolución de las redes de investigación hacia un modelo de crecimiento basado en las leyes del mercado (market driven) y, por lo tanto, hacia situaciones en las que el poder de coordinación y las inversiones ya no se concentrarán en las infraestructuras sino en la satisfacción del usuario final (asistencia, capacitación, interfaces, aplicaciones de usuarios). La importancia de este fenómeno en las redes de investigación de los países en vías de desarrollo puede ser de gran interés para los países industrializados y una enseñanza para el mundo entero.

UN MODELO ADECUADO

El presente artículo pretende definir un conjunto de factores a favor de un modelo más equilibrado que reúna lo mejor de las perspectivas ascendente (bottom-up) y descendente (top-down), adaptado a las características propias de los países en vías de desarrollo.

Y puesto que el "pragmatismo" es saludable en las actividades de las redes, presentaremos una herramienta metodológica que se puede aplicar en la realidad y que, de hecho, ya ha dado buenos resultados en dos casos concretos, en el Perú y la República Dominicana.

II - ANTECEDENTES

La metodología propuesta es el resultado de un conjunto de estudios detallados llevados a cabo desde 1988 por el autor, su equipo y un grupo de colaboradores en América Latina y el Caribe. REDALC (Red de América Latina y el Caribe) es un proyecto elaborado por la Unión Latina, organismo internacional cuya vocación es la defensa de las culturas y los idiomas neolatinos, y que pretende brindar una solución global, integral y estable para toda la región en lo referente a redes de investigación. Los estudios mencionados se realizaron en primer lugar a partir de Europa, en los años 1988 y 1989. Más tarde, gracias a fondos recibidos de la Comunidad Europea en 1990, se efectuó un estudio de factibilidad de dos años de duración. Hacia mediados de 1991, la Unesco se sumó al estudio de factibilidad para tratar todo lo relacionado con el contenido de la red de información. La Academia de Ciencia de América Latina (ACAL) participó en los estudios de la Unesco. El equipo REDALC de la Unión Latina se hizo cargo también de otras actividades y estudios relacionados, a saber:

un estudio sobre el impacto de la red de investigación en las Antillas Francesas,

la coordinación de una lista de distribución para informar sobre las actividades de las redes de la región ([email protected]),

la coordinación del desarrollo de una interfaz para PC, moderna, multilingüe e independiente del tipo de red (MULBRI: Mensajería de la Unión Latina en Beneficio de Redes de Investigadores),

en colaboración con el PNUD y con investigadores nacionales, participación protagónica en el lanzamiento de dos redes nacionales, en el Perú y en la República Dominicana,

en colaboración con la Unesco y con la participación de especialistas de diversas nacionalidades (véanse los autores de la referencia n° 5), organización, en Santo Domingo, del primer taller de la región destinado a "enseñarle al usuario cómo utilizar y aprovechar las redes de investigación".

A través de este proceso iniciado en 1988, el concepto de la red para América Latina fue evolucionando de una mera copia de EARN hacia algo más específico y adecuado a la realidad económico-estructural de la región (el modelo REDALC).

Estamos convencidos de que la mayor parte de la experiencia acumulada se aplica a otras regiones del planeta (Africa, Asia, Oriente Medio, Europa Oriental). Quedará en manos del lector, y sobre todo de los diseñadores de redes, el evaluar cuán similares son las condiciones en esas regiones como para aplicar la metodología tal cual o con las adaptaciones culturales necesarias.

III - PAISES INDUSTRIALIZADOS FRENTE A PAISES EN VIAS DE DESARROLLO

TODO ES CUESTION DE MEDIDAS

Los fondos requeridos inicialmente para el funcionamiento de la red EARN, de aproximadamente diez millones de dólares, se obtuvieron, durante los años 1985 a 1987, gracias a una subvención de IBM destinada a cubrir los gastos de las telecomunicaciones internacionales. Nótese al pasar un hecho económico de interés capital: indirectamente, ¡la creación de redes de investigación dio lugar a una significativa transferencia de capitales privados de la industria informática hacia los operadores públicos nacionales de telecomunicaciones!

La operación de las redes nacionales requiere un presupuesto anual que va de varios cientos de miles de dólares a unos pocos millones. Hasta ahora, la mayor parte de los gastos que aparecen claramente en dichos presupuestos corresponden a las telecomunicaciones mientras que, casi sin lugar a dudas, los gastos invisibles (esencialmente mano de obra y recursos suministrados gratuitamente por las universidades) van a la asistencia al usuario, el equipo, los servicios de programación, la administración local y las telecomunicaciones nacionales. Sin embargo, la mayor parte del "presupuesto real" (aproximadamente entre el 60% y el 70%) está destinada al pago de la factura de las telecomunicaciones, aunque la cantidad y la calidad de los bienes y servicios gratuitos con los que cuentan las redes de investigación no son despreciables, por el contrario, puesto que, si se evaluaran en términos de producción, costos y beneficios, aparecería claramente su valor económico.

El actual sistema de redes brasileño (que llega apenas al 20% de los usuarios potenciales) goza de una participación considerable del Estado de San Pablo, que contribuye anualmente con varios millones de dólares.

Una de las primeras experiencias de la red EARN llevadas a cabo en Africa tuvo lugar en Costa de Marfil hace unos cinco años. Las inversiones iniciales alcanzaron varios miles de dólares para un reducido número de usuarios (se calcula una inversión de alrededor de 10.000 dólares por usuario).

Segun los países, la relación entre la población de investigadores y la población nacional es de entre uno y diez por mil en los países industrializados, mientras que, en los países en vías de desarrollo, es aproximadamente diez veces menor.

En Francia, el número de profesionales del sector Ciencia y Tecnología es de alrededor de 200.000, cifra igual al total de esa misma población para América Latina y el Caribe (aquí el criterio de definición de un "científico" es mucho más amplio).

El salario mensual promedio del personal académico en América Latina es de 150 dólares y el de los investigadores, a pesar de que en algunos casos alcanza niveles internacionales (varios miles de dólares), no suele sobrepasar unos cientos de dólares.

El presupuesto necesario para la creación de la red de investigación de Puerto Rico (CRACIN) fue aproximadamente de 20 millones de dólares. Cabe señalar que, curiosamente, en Puerto Rico se encuentran reunidos una historia cultural latinoamericana y un modelo económico norteamericano. Gracias a esa inversión se logró instalar una red moderna que funciona a la vez con varios protocolos, y fibras ópticas (velocidad T1) entre las diversas universidades cuyos terminales disponen de facilidades de conexión a distancia en fracciones de segundo.

Veinte millones de dólares es una suma suficiente como para construir una red básica propia de toda la región de América Latina, tomando en cuenta el suministro de un transpondedor por parte de la región en compensación al aporte de algún organismo internacional en materia de equipos y transferencia de tecnología. La existencia de tal red básica contribuiría a reducir significativamente los costos operativos anuales relativos a las telecomunicaciones hasta alcanzar apenas unos cientos de miles de dólares por año para el conjunto de la región.

Nota: la comparación que acabamos de hacer no es una mera coincidencia sino que pretende transmitir un mensaje vital. Con veinte millones de dólares una isla de 4 millones de habitantes construyó una red de investigación moderna para unos 2.000 usuarios, lo que representa una inversión por usuario igual a 10.000 dólares. Con veinte millones de dólares se podría lograr un nivel básico de servicios de red para toda la región y sus 200.000 usuarios potenciales, con lo cual la inversión por usuario sería de tan sólo 100 dólares. Es evidente que sería deshonesto pasar por alto el hecho que, en el primer caso, el presupuesto incluía absolutamente todo desde los terminales hasta las fibras ópticas, mientras que, en el segundo, se habla sólo de una infraestructura básica y de los costos de instrumentación. De todas formas, esa es la suma con la que la región lograría ganar definitivamente la batalla, generalizando las redes de investigación a bajo precio.

DATOS ELEMENTALES ACERCA DE LAS REDES EN LOS PAISES DESARROLLADOS

La mayor parte de los investigadores, lógicamente, forman parte de la comunidad académica, repartiendo equilibradamente su tiempo entre la enseñanza y la investigación.

El salario de los académicos (varios miles de dólares) los incita a trabajar con dedicación exclusiva en sus instituciones, sin necesidad de buscar otros empleos.

Gran mayoría de las instituciones académicas tienen las características adecuadas en términos de presupuesto, capacidad administrativa y coordinación, así como en todo lo relacionado con material informático y de telecomunicaciones para asegurar la instalación, operación y mantenenimiento de un nodo.

La dimensión del mercado académico en cuanto a productos informáticos es lo suficientemente amplia como para que los constructores inviertan anualmente, en cada país, cientos de miles de dólares.

Se han desarrollado redes nacionales de conmutación de paquetes independientemente de las de investigación.

La contribución al financiamiento de las telecomunicaciones para las redes es marginal en comparación con la totalidad de los presupuestos nacionales de Educación y/o Ciencia y Tecnología.

El proceso de creación de redes de investigación en el mundo desarrollado se basa implícitamente en estos datos elementales. ¿Pero acaso se pueden aplicar del mismo modo al sector de la investigación en los países en vías de desarrollo? Algunos tal vez sí pero la mayoría no. En tales condiciones, ¿sería prudente aplicar el mismo modelo estructural?

IV - ¿COMO REUNIR LOS FONDOS PARA CREAR Y OPERAR REDES EN LOS PAISES EN VIAS DE DESARROLLO?

El costo unitario de una red nacional global gira en torno al millón de dólares. ¿Cómo reunir los fondos?

* ¿Dirigiéndose directamente a las instituciones usuarias?

La gran mayoría de los centros de investigación no disponen de los fondos necesarios para crear y operar redes, a pesar de que todo el mundo está de acuerdo en que hay que democratizar el acceso a las mismas.

* ¿Dirigiéndose a los poderes públicos?

No cabe duda de que los Gobiernos deberían participar en el proceso de financiamento de las actividades que contribuyan al desarrollo global de las redes pero sus magros presupuestos raramente les permite ocuparse de actividades de educación o investigación que se consideran menos urgentes que, por ejemplo, la alfabetización, la ampliación de las infraestructuras educativas básicas o el aumento de los salarios del personal docente.

* ¿Dirigiéndose a los industriales del sector informático?

¡Los tiempos han cambiado...! Los márgenes de ganancia del sector han disminuido, las empresas ya no hacen regalos (si pueden llamarse regalos...) y menos aún en los países en vías de desarrollo porque saben que pueden esperar muy poco a cambio.

Quedan tres caminos:

1) Favorecer la integración regional

Se podrían realizar importantes economías de escala construyendo en forma coordinada infraestructuras regionales de transporte, firmando acuerdos regionales para el cobro de impuestos sobre las telecomunicaciones utilizadas por las redes de investigación en el plano nacional e internacional y, por último, algo no menos importante, poniendo a disposición de las redes canales satelitales regionales como una respuesta adecuada, estable y autónoma a las necesidades de la región.

La Comunidad Económica Europea ha invertido y sigue invirtiendo mucho dinero para preparar el terreno de la integración europea en materia de redes, esencialmente mediante una política normativa y también fomentando negocios conjuntos (joint ventures) para desarrollar proyectos específicos en sectores de alta tecnología; en ambos casos, los objetivos están planteados a mediano plazo.

Para las regiones en desarrollo, la integración es una necesidad financiera vital e inmediata, y las redes son un ejemplo típico en el cual debería funcionar plenamente la cooperación interregional e incluso la cooperación sur-sur.

2) Negociar con las empresas de telecomunicaciones

Gran parte de los países latinoamericanos se han dotado, en los últimos años, de infraestructuras de redes de datos y de servicios de valor agregado, o están a punto de hacerlo. Ya está ampliamente comprobada la importancia que tienen para el desarrollo las infraestructuras de telecomunicaciones (véase ref. 13). En los países en vías de desarrollo, es inconcebible una situación similar a la que prevaleció en el mundo industrializado, es decir una escasa cooperación entre los diseñadores de redes y las empresas nacionales de telecomunicaciones. A éstas les conviene, además, conquistar una porción de mercado que, a pesar de ser pequeña, tiene enormes efectos multiplicadores. No hay que olvidar que en la universidad de hoy se forman los empresarios del mañana. Brindar descuentos especiales a la comunidad de investigadores podría ser una solución inteligente para resolver la vieja historia del huevo y la gallina, que frena el desarrollo del mercado de la telemática. Parece efectivamente más rentable invertir para atraer al sub-mercado de los investigadores que invertir en campañas de publicidad orientadas hacia todo el mercado... La red de la República Dominicana fue la primera en contar con el apoyo masivo de una empresa de telecomunicaciones que, dicho sea de paso, por ser privada, sabe lo que son los negocios...

Las redes de investigación son un sector crucial en el que tienen intereses comunes los actores del mercado de las telecomunicaciones, el mundo de la ciencia y tecnología y, a largo plazo, todos los sectores en desarrollo.

3) Fomentar la cooperación multilateral

La cooperación multilateral es probablemente la única manera de iniciar el proceso de financiamiento. Las organizaciones internacionales pueden suministrar los fondos necesarios para lograr una infraestructura regional básica y actuar como aceleradores de los mecanismos evocados en los puntos 1 y 2, en el marco de programas regionales.

Es cierto que se podría considerar, tal como se ve en la ref. 8, que construir un nodo es algo fácil y barato, y que el usuario final podría pagar la factura de las telecomunicaciones, puesto que es más económico usar los sistemas de transmisión de datos que los medios de comunicación tradicionales (teléfono, télex o fax). También se podría pensar que un modelo de este tipo sería exclusivo de quienes lo puedan pagar y, por lo tanto, estaría reservado a una minoría formada por las universidades más adineradas del tercer mundo. Ahora bien, ¿es ése el verdadero credo de las redes? ¿Sería justo que los investigadores del tercer mundo paguen por lo que sus colegas del mundo industrializado consiguieron gracias a subsidios?

V - ¿PUEDE UNA BAÑERA PERSONAL BRINDAR EL MISMO SERVICIO QUE UNA PISCINA PUBLICA? O UNA INTRODUCCION AL DISEÑO DE REDES

Existe una idea falsa muy generalizada acerca de los supuestos efectos mágicos del modelo ascendente (bottom-up) según la cual bastaría con crear un nodo de unos pocos usuarios y conectarlo con otro nodo para generar espontáneamente una red. Pero ya vimos que para transformar un nodo de unos pocos usuarios en una verdadera red nacional hace falta mucha organización, tecnología y dinero.

Tomemos un ejemplo. Si comparamos una bañera con una piscina, resulta evidente que en ambas uno puede darse un chapuzón, pero no sería muy realista pensar que se puede brindar un servicio de baños a toda una comunidad... ¡en una bañera personal!

Y si su plomero le dice que no hay problemas técnicos para transformar su bañera en una piscina, ¡desconfíe! Puede ser que el problema más difícil de resolver no sea la tubería sino un problema de organización sobre el cual su plomero no estaría capacitado para opinar, como por ejemplo:

buscar a los posibles bañistas y responder a sus necesidades,

determinar las tarifas de la piscina y demás facilidades,

constituir un equipo de profesores de natación y bañeros,

ocuparse de la administración y la contabilidad del negocio,

garantizar la calidad del agua, la seguridad de los bañistas y, por supuesto, su privacidad en los vestuarios,

determinar la afluencia de bañistas y calcular en consecuencia el algoritmo más adecuado para la purificación y la renovación del agua,

prever y estar preparado para satisfacer otras posibles necesidades de los clientes (toallas, bebidas, comida, música, solarium, etc.)

...

Al fin y al cabo, uno se da cuenta de que es tal la cantidad de trabajo y dinero necesaria para transformar su bañera en piscina pública que sería mejor consultar con un profesional...

Con esta comparación no pretendemos desalentar a quienes intenten crear redes a partir de proyectos de poco alcance. Estos proyectos son necesarios en el proceso de aprendizaje del funcionamiento de las redes pero no hay que confundir un sistema de correo electrónico de diez usuarios con un sistema nacional.

Por culpa de un método llamativo en el inventario de redes de investigación que consiste en contar los nodos, se ha llegado al extremo de repertoriar sistemáticamente los países con acceso a redes sin tomar en cuenta el número de usuarios. ¿Pero a quién le importa en realidad el número de nodos sino a los vendedores de equipos informáticos? Lo importante es el número de usuarios. Más valdría llevar a cabo la enorme tarea de dimensonar el acceso a las redes, a nivel mundial, por países (véase ref. 2), incluyendo en alguna medida el número de usuarios. Por lo menos se podrían establecer niveles de índices de penetración: menos del 1%, entre el 1% y el 10%, entre el 10% y el 25%, entre el 25% y el 50%, y más del 50%. Que no existan actualmente censos o repertorios sistemáticos de usuarios en el marco de Internet no es motivo suficiente como para no intentar hacer algo, puesto que siempre se puede hacer un cálculo aproximado. Por ejemplo, es difícil diferenciar los verdaderos usuarios del correo electrónico de los que tienen una dirección pero no la usan, porque sobre esto no haya datos concretos, pero siempre se pueden aplicar leyes estadísticas.

La comparación entre la bañera y la piscina también sirve para desmitificar a los gurús técnicos. Entre las muchas etapas que hay que pasar para construir una red de investigación de alcance nacional, el establecimiento de la infraestructura técnica es, por cierto, un momento importante, pero se puede planificar, tanto desde el punto de vista del tiempo como del dinero. Además, en comparación con la mano de obra que se requiere para cumplir con la totalidad de las tareas, el número de técnicos que intervienen en la instalación de un solo nodo es poco significativo. En cambio, las tareas que exigen organización y relaciones humanas son mucho menos deterministas y, por lo tanto, más sujetas a retrasos y errores.

 

Construir una red tiene mucho más que ver con trabajar juntos para lograr una estructura común que con la mera instalación de equipos y programas informáticos.

 

VI - ¿QUE ES UNA RED DE INVESTIGACION?

Una red de investigación es un conjunto de servicios telemáticos puestos a disposición de una amplia comunidad de usuarios. Más allá de instalar un nodo y conectarlo, por un lado, con varios usuarios y, por el otro, con otros nodos en el mundo, crear una red implica necesariamente realizar una serie de tareas antes de llegar a un resultado digno de destacar:

identificar la base de usuarios y sus necesidades (diagnóstico, cuantificación, estimación del crecimiento de la base de usuarios, encuestas, repertorios, etc.),

federar a los usuarios en una estructura ascociativa (estatutos, reglas, posibilidades de colaboración, etc.),

definir una estrategia de conscientización de la base de usuarios,

brindar capacitación y perfeccionamiento a los usuarios,

asistir a los usuarios (documentación, puntos de información, etc.),

coordinar las relaciones entre los usuarios y la red (gestión del perfil de usuario, seguridad, confidencialidad, etc.),

coordinar los servicios de la red (control de las conexiones y del nodo),

administrar las finanzas (contabilidad y presupuestos),

asegurar el mantenimiento de la red (prevención, detección, reparación de fallos, etc.),

analizar el tráfico y garantizar el suministro de la red en cuanto a líneas telefónicas, puertos X25, conexiones internacionales, capacidad de memoria, módems, etc.).

Por supuesto, esta lista no es exhaustiva ni mucho menos.

Más allá de las funciones básicas de correo electrónico, listas de distribución, conferencias, conexiones a distancia y transferencia de ficheros, hay que considerar con especial atención, desde el principio del funcionamiento de la red, las aplicaciones, es decir, por ejemplo, repertorios de usuarios y conferencias, redes de información, bases de datos, etc.

La calidad de los servicios propuestos por la red es primordial puesto que el usuario va a fijarse en la calidad de cada uno de los componentes del sistema, es decir:

acceso al sistema (en general, en este tipo de redes, 24 horas al día y todos los días de la semana),

confiabilidad del sistema (seguridad de que no se pierdan los datos),

tiempos de respuesta,

mantenimiento (lapso medio transcurrido entre dos fallos, lapso medio transcurrido entre un fallo y su reparación),

calidad de la interfaz con los usuarios (tiempo de apredizaje, facilidad de uso, funcionalidad),

calidad de la asistencia al usuario (lapso medio transcurrido antes de resolver un problema del usuario, tranquilidad del usuario en cuanto a que su problema se tomará en cuenta y se resolverá, claridad y eficacia de la documentación),

calidad de los suministros de la red (si hay demasiados suministros en comparación con el tráfico real, la factura será demasiado elevada; si no hay suficientes suministros se podría ver afectada la calidad de otros factores tales como los tiempos de respuesta o la disponibilidad del sistema),

posibilidades de adaptaciones futuras de la red (capacidad de prever y llevar a cabo armoniosamente las actualizaciones de la red que respondan a los cambios tecnológicos y al aumento del tráfico),

seguridad del sistema.

Este concepto de calidad se traduce en términos de ingeniería sofisticada y necesidades de administración del sistema:

modelización y/o prototipos,

duplicación de los componentes del sistema,

procedimientos de mantenimiento a distancia,

procedimientos de cobertura y recuperación de datos,

dimensionamiento de los recursos en base a cálculos de cola de espera,

estrategia de interfaces de telecomunicación (protocolos y equipos),

estrategia de tráfico al menor costo,

procedimiento de planificación y control.

Lo que acabamos de ver se aplica en realidad a cualquier servicio informático destinado a un público amplio y no se debe perder de vista que, en cualquier caso, el objetivo fundamental es satisfacer a la mayor cantidad de usuarios potenciales con una adecuada relación calidad-precio.

Veamos concretamente cuáles fueron los principios, reglas y pasos que se fijaron especialmente para el lanzamiento de redes en dos países en vías de desarrollo (Perú y República Dominicana).

VII - PAUTAS PARA LA CONSTRUCCION DE REDES EN LOS PAISES EN VIAS DE DESARROLLO

ADVERTENCIA

Aprender a construir y administrar una red es, sin lugar a dudas, una historia de nunca acabar. A continuación queremos mostrar lo que nuestro equipo ha logrado hasta el momento a partir de las experiencias y estudios realizados. Sabemos que queda aún mucho por hacer para mejorar nuestra metodología pero confiamos en que los lectores nos transmitirán sus reacciones, críticas y sugerencias para lograrlo. También precisemos que las pautas que se mencionan a continucaión tendrán que ser adaptadas a las circunstancias particulares y características sociales, económicas y culturales a nivel nacional y regional.

7.1 INTRODUCCION

Lo que sigue puede ser tomado como una herramienta metodológica, resultado de:

un diagnóstico minucioso de las necesidades en materia de redes en los países correspondientes (1990),

la conceptualización de un modelo (1991),

una primera experiencia piloto en el Perú (finales de 1991),

la incorporación de los resultados de la primera experiencia piloto en el modelo conceptal (principios de 1992),

una segunda experiencia piloto en la República Dominicana (mediados de 1992),

una última fase de conceptualización.

En ninguno de estos dos países se puede considerar que la construcción de una red es una tarea fácil. En el caso del Perú, las dificultades procedían del tamaño de la población de investigadores, la complejidad de la situación sociocultural y los repetidos intentos de creación de redes. El caso de la República Dominicana fue obviamente más sencillo, dados el tamaño y la calidad de la infraestructura de telecomunicaciones; sin embargo, hubo que aprender desde el principio y todavía hoy los investigadores no están identificados ni organizados.

La metodología está compuesta de tres elementos bien definidos:

1) ESQUEMA DE PRIORIDADES PARA RESOLVER PROBLEMAS: organización lógica y jerárquica de los diferentes tipos de problemas, utilizada para establecer prioridades.

2) ETAPAS: organización cronológica del desarrollo de la red, utilizada para planificar las tareas.

3) DEMAS INGREDIENTES: identificación de algunos factores clave y demás ingredientes que conducen al éxito.

7.2 ESQUEMA DE PRIORIDADES PARA RESOLVER PROBLEMAS

Es necesario resolver los problemas que se plantean en orden descendente de prioridades, según el siguiente esquema piramidal:

INSTITUCION

ORGANIZACION

FINANZAS

TECNICAS

___________________________________

INSTITUCION: ¿De qué modelo institucional se trata? ¿Cuáles son los sectores de la sociedad que participan en el proyecto? ¿Bajo qué condiciones? ¿Qué tipo de relaciones tienen entre sí? ¿Qué tipo de relaciones tienen con los poderes públicos, con la empresa de telecomunicaciones y con otras redes regionales?

ORGANIZACION: ¿Qué tipo de organización se ha de elegir? ¿Qué modelo de desarrollo? ¿Qué modelo de operación de la red?

FINANZAS: ¿Cómo conseguir financiamiento? ¿Cómo utilizar el presupuesto?

TECNICAS: ¿Qué arquitectura y qué diseño tendrá la red? ¿Por qué tipo de instrumentación se optará?

Esta jerarquía aparece cuando se toman en cuenta algunos aspectos clave que no siempre se toman en cuenta:

Elaborar un plan técnico perfecto si no se cuenta aún con el financiamiento necesairo para ponerlo en práctica no resulta muy satisfactorio, ya que los argumentos técnicos no suelen ser un medio fácil para conseguir dinero...

Contar con el dinero y con el modelo técnico apropiado, sin tener una buena estructura organizativa, tampoco suele resultar, ya se corre el riesgo de despilfarrar el dinero sin obtener resultados concretos. La próxima vez será más difícil conseguir financiamiento...

Pero tal vez la situación más frustrante y difícil de superar sea contar con la solución técnica adecuada, con el dinero necesario para llevarla a la práctica y con la estructura organizativa correspondiente, sin que exista una voluntad política para llevar adelante el proyecto hasta el final.

El esquema piramidal no significa necesariamente que la solución de los problemas que se plantean deba darse según un orden cronológico sino que se trata sólo de un orden de prioridades.

Presentamos a continuación un conjunto de pautas asociadas a cada nivel de la pirámide.

7.2.1 NIVEL INSTITUCIONAL

Asociar en un mismo proyecto instituciones dedicadas a tareas de investigación pertenecientes a todos los sectores de la sociedad: universidades privadas, universidades públicas, centros de investigaciones académicos, consejos y centros de investigaciones de los poderes públicos, organizaciones no gubernamentales (ONG) y organismos internacionales. Cada uno de dichos sectores debe estar representado por lo menos por un cierto número de instituciones.

Mantener un proceso de desarrollo equilibrado en el que se optimicen al mismo tiempo los niveles de autonomía y de participación de cada grupo.

Vincular directamente a los investigadores activos, futuros usuarios finales, y, por su intermedio, lograr que las instituciones a las que pertenecen den su apoyo político al proyecto.

Estos tres objetivos institucionales representan el mayor desafío de todo el proceso de construcción de la red, por lo cual merecen mayores comentarios. Ser investigador en América Latina no es tarea fácil, hay más trabas que incentivos y hace falta mucha paciencia y perseverancia. Con excepción de las instituciones más destacadas (universidades y centros de investigaciones muy bien organizados, que de hecho existen, pero que no albergan a la gran masa de investigadores), es díficil escaparle al pluriemplo y la búsqueda de financiamientos. En los casos en que no ha habido mucho apoyo institucional al mundo de la investigación, las ONG han desempeñado un papel histórico fundamental. Y, si bien es obvio que, en ningún proyecto de investigación, se podría tomar como una obligación propia el consolidar el sector de la Investigación académico y oficial, sería irresponsable dejar de lado a las ONG dinámicas que luchan por conseguir mayores estructuras económicas y sociales.

Una vez cumplidos estos objetivos, se descubre que la formación de un grupo de usuarios de redes tiene otro aspecto secundario de vital importanica: participar en la construcción de las instituciones de un país, que, dicho sea de paso, son la base del desarrollo.

Tener presente permanentemente en la toma de decisiones el factor de integración regional, primero, a nivel subregional, y luego, a nivel regional.

Buscar el apoyo de los organismos internacionales o recurrir a los mecanismos de la cooperación bilateral indistinta y complementariamente, y administrar en forma autónoma ambas contribuciones.

Participar en la promoción del sector nacional de las telecomunicaciones de datos (principalmente redes X25), integrar a los representantes del sector en el proceso de creación de redes y, a cambio, negociar las mejores tarifas posibles para el acceso a las redes nacionales X25 y las conexiones internacionales.

Desarrollar relaciones de cooperación con el sector industrial.

Mantener, como objetivo secundario, el apoyo al sector científico-tecnológico. En los países en los cuales existe una estructura oficial sólida, no hay que tratar de presentarse como una estructura competitiva, sino más bien desarrollar un mecanismo de integración total con el sector oficial. Cuando existe un Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (o institución oficial equivalente) que esté a la vanguardia de la creación de redes y que se ocupe de las cuestiones de carácter técnico, queda algo muy importante por hacer: constituir un grupo de usuarios de redes capaz de orientar las decisiones oficiales en el sentido más conveniente para el conjunto de los usuarios.

7.2.2 NIVEL ORGANIZATIVO

Organizar la participación de los usuarios en cada etapa del desarrollo de la red.

Poner en un mismo nivel a todas las instituciones vinculadas al proyecto, en el modelo final de organización.

Brindar los mismos derechos y exigir las mismas obligaciones a las instituciones que se sumen al proyecto una vez iniciado.

Adoptar, con el consenso de todos los actores, la forma jurídica de una asociación sin fines de lucro. En cuanto a los estatutos de la asociación, tomar como modelo y adaptar los que existen en otros países.

Comenzar por una etapa informal y abierta durante la cual las instituciones estén representadas extraoficialmente por futuros usuarios finales interesados en el proyecto.

Empezar a formalizar la estructura jurídica de la asociación sólo cuando se han alcanzado buenos niveles de consenso y participación.

Considerar prioritaria la capacitación de los usuarios por encima de la capacitación de los técnicos. En los países que cuentan con una amplia base de usuarios, capacitar a formadores de usuarios.

Pensar, desde un principio, en integrar las redes nacionales de información. Aprovechar el impulso para crear nuevas redes de información.

Pasar del modelo de tipo "asamblea" al de tipo "comité" cuando se haya logrado una coordinación efectiva de los participantes activos y el número de éstos sea demasiado elevado como para tomar decisiones viables en las asambleas.

Garantizar la información y la transparencia total en las actividades de coordinación del grupo de usuarios.

Considerar tarea de todos la difusión de los conocimientos adquiridos durante el proceso de desarrollo de la red y dar libre acceso a todos los documentos que se hayan producido.

Si en la etapa de instalación de nodos se cuenta con apoyo externo, o con una ayuda masiva de una empresa de telecomunicaciones, organizarse como para iniciar la transferencia de tecnología y hacer que ésta forme parte del acuerdo.

7.2.3 NIVEL FINANCIERO

Tratar de conseguir apoyo de los organismos internacionales o de las instituciones de la cooperación bilateral para todo lo relacionado con el desarrollo y la formación.

Lograr el mayor grado de apoyo posible por parte de los operadores nacionales de telecomunicaciones, sobre todo, en cuanto al acceso a las redes X25 y las conexiones internacionales.

Tratar, en la medida de lo posible, de que el volumen de tráfico pase por un país vecino.

Solicitarle a los principales proveedores que faciliten el acceso gratuito a los bancos de datos científicos comerciales durante un período delimitado.

Negociar con los industriales nacionales el presupuesto para cubrir los costos de funcionamiento.

Obtener equipos gratuitos de las empresas.

Siempre conviene más recibir apoyo financiero o solicitar el patrocinio de las empresas que recibir donaciones no deseadas. Es bien sabido que hay casos en los que los gastos extras acarreados por la aceptación de ciertos equipos gratuitos son más elevados que la factura total por la compra de los equipos adecuados. Lo esencial es no rechazar el patrocinio de las empresas y adoptar paralelamente una actitud de negociador responsable, capaz de analizar las consecuencias indirectas de una decisión.

Otra forma de lograr mayor libertad e independencia es recibir donaciones en forma de contratos por una suma simbólica.

Establecer acuerdos subregionales y regionales para minimizar los costos de las conexiones internacionales.

Utilizar las estructuras regionales de capacitación que ya estén en funcionamiento.

Mantener un cierto nivel de autofinanciamiento como objetivo razonable y determinar una suscripción básica para las instituciones y precios definidos para los servicios extras. En general, no se logra recaudar suficiente dinero como para cubrir la totalidad de los gastos de funcionamiento, pero vale la pena equilibrar el presupuesto administrativo de la asociación.

7.2.4 NIVEL TECNICO

Minimizar el número de nodos. En los países cuyos usuarios se cuentan por unos pocos miles, tratar de adoptar un modelo de nodo único.

Utilizar el protocolo UUCP como mejor solución de entrada. Introducir el protocolo TCP-IP en el plan y estar preparados para la arquitectura OSI en el futuro.

Si existe una red X25 confiable, reforzar su uso para conectarser con el nodo. En el caso contrario, y sobre todo si la red telefónica está en muy mal estado, considerar la posibilidad de recurrir a una estación de recepción satélite individual (VSAT).

A nivel de usuario, alentar el uso del PC, que es la forma más natural de conectarse con el nodo. Tratar de conseguir la interfaz PC gratis más adecuada.

7.3 ETAPAS

Se distinguen cinco etapas principales en el proceso de creación de redes: sensibilización, concepción, desarrollo, fase inicial de utilización y fase de madurez.

7.3.1 SENSIBILIZACION

EMPIEZA:

Cuando alguien consigue demostrar el interés de las redes de investigación para un determinado sector de la comunidad de investigadores, sea a nivel personal o institucional.

TERMINA:

Cuando cada usuario potencial ha llegado al nivel de conscientización deseado, lo que significa que esta etapa seguirá avanzando, durante algún tiempo, en paralelo con todas las demás.

OBJETIVO:

Conseguir la máxima conscientización por parte del usuario potencial, sea cual fuera su sector de origen.

PALABRAS CLAVE:

Proceso de aprendizaje. Conscientización.

TAREAS:

Organizar campañas de demostración y promoción en diferentes medios de comunicación. Establecer contactos directos con las personas e instituciones clave.

PUNTOS CRITICOS:

Si el proceso de desarrollo de la red es lento, mantener interesados a los primeros usuarios. Establecer un equilibrio entre el deseo de satisfacer las expectativas de los nuevos usuarios y la atención que se debe seguir prestando a sus predecesores.

COMENTARIOS:

Según el nivel de preparación del país, esta etapa puede durar entre varios meses y varios años, lo cual se debería aprovechar para fomentar una sólida comprensión mutua entre la red y los operadores de las telecomunicaciones, demostrándoles que no pueden sino sacar provecho de las campañas de promoción mencionadas más arriba. Por otra parte, se recomienda solicitarles puntualmente que patrocinen algunas exposiciones -por ejemplo, proporcionando, en tales ocasiones, acceso gratuito a las redes de datos- de manera tal que se vaya creando una costumbre para el futuro.

7.3.2 CONCEPCION

EMPIEZA:

Cuando un grupo homogéneo, representativo y motivado de usuarios finales decide unirse y perseguir un objetivo común.

TERMINA:

Cuando el número de usuarios vinculados al proyecto es tal que se hace preciso dividir las tareas entre varios comités coordinados, a su vez, por un comité de orientación.

OBJETIVO:

Formar un grupo de usuarios. Crear consenso, en el seno del grupo, acerca de los principales objetivos generales que se persiguen.

PALABRAS CLAVE:

Reuniones de grupo. Intereses. Participación. Dinámica. Federación. Información.

TAREAS:

Organizar una reunión general para ponerse de acuerdo sobre los principios básicos. Formular un diagnóstico y una estrategia globales para cada uno de los componentes del proceso.

PUNTOS CRITICOS:

Hacer frente a los fenómenos de dinámica de grupo (conflictos de poder, liderazgo o intereses ocultos).

COMENTARIOS:

Si se quiere mantener vivo el impulso necesario para construir la red, es preciso tener un plan de acción establecido minuciosamente y que permita estructurar paso a paso el deseo de participación de los usuarios en el marco de comités organizados y unidos para lograr objetivos comunes concretos. Hay que resaltar que la naturaleza misma de este mecanismo es tan importante como los resultados obtenidos, ya que crea una dinámica en el seno del grupo.

7.3.3 DESARROLLO

EMPIEZA:

Cuando termina la etapa precedente, o sea, cuando los subgrupos se han puesto de acuerdo sobre objetivos específicos y estructurados.

TERMINA:

Cuando hayan empezado a funcionar tanto el grupo de usuarios como los servicios de la red.

OBJETIVO:

Conformar el grupo de usuarios y los servicios de la red.

PALABRAS CLAVE:

Comités. Acción.

TAREAS:

Elaborar un plan de acción coordinado. Determinar todos los elementos indispensables para el buen funcionamiento de la asociación (estatutos, logotipo, firmas, etc.). Preparar acuerdos nacionales, regionales e internacionales. Instrumentar la solución tecnológica elegida. Obtener apoyo financiero nacional.

PUNTOS CRITICOS:

Mantener un alto nivel de participación por parte de los usuarios a pesar de que se adopte un modelo de organización más jerárquico. Mantener la transparencia de las informaciones transmitidas por el comité de orientación a los subcomités. Obtener apoyo por parte de las instituciones para los distintos grupos. Conseguir en el comité de orientación el mejor equilibrio posible entre las capacidades individuales y las institucionales. Organizar el proceso de sensibilización de modo tal que se eviten los puntos muertos, así como los efectos negativos sobre los plazos definidos para el proyecto global de construcción de la red.

COMENTARIOS:

¡Con esta etapa no se juega! Quedan todavía muchas cosas por hacer pero, una vez iniciada esta etapa de despegue, ya no será posible echarse atrás. Los miembros del grupo de usuarios deben pasar del papel de simples espectadores al de protagonistas, y durante esta evolución muy selectiva será cuando se destacarán las personas clave, capaces de convertirse en los futuros administradores de la asociación.

7.3.4 FASE INICIAL DE UTILIZACION

EMPIEZA:

Cuando los servicios de la red estén listos para funcionar.

TERMINA:

Cuando el número de usuarios activos haya superado el 10% de la base total de usuarios potenciales y se haya conseguido un presupuesto de funcionamiento estable.

OBJETIVO:

Verificar cada elemento constitutivo y ajustar cada parámetro del modelo de funcionamiento de la red.

PALABRAS CLAVE:

Capacitación y asistencia al usuario. Ajuste.

TAREAS:

Formalizar los acuerdos pendientes. Aplicar sistemáticamente planes de capacitación de usuarios y elaborar un mecanismo eficaz de asistencia a los mismos. Buscar e instalar un local. Contratar empleados. Elaborar un esquema de contabilidad viable. Establecer un esquema de difusión sistemático. Idear un plan de crecimiento.

7.3.5 FASE DE MADUREZ

EMPIEZA:

Cuando los servicios de la red y la curva de crecimiento del número de usuarios se hayan estabilizado.

TERMINA:

Nunca, si todo va bien...

OBJETIVO:

Mejorar la calidad de los servicios de la red y satisfacer nuevas demandas de los usuarios.

TAREAS:

Todas las tareas propias de la operación de redes.

PUNTOS CRITICOS:

Satisfacer al usuario. Instalar aplicaciones.

COMENTARIOS:

Cualquier comentario iría más allá de los límites de este artículo.

7.4 COMO FOMENTAR EL INTERES DE LOS USUARIOS Y LOGRAR LA CLAVE DEL EXITO

La clave del éxito consiste en mantener la cohesión y la dinámica del grupo de participantes, a lo largo de todo el proceso de instalación de la red, lo cual es posible gracias a varios mecanismos esenciales.

7.4.1 Un buen equilibrio entre los coordinadores y la base de usuarios

La experiencia muestra claramente la necesidad de contar con un coordinador experimentado en el terreno de las redes, que sea capaz de encabezar el proceso de creación y que esté más atento al bienestar del usuario final que a los aspectos técnicos. La tarea esencial del coordinador consistirá en hacer que converjan los esfuerzos de sectores con objetivos e intereses distintos, por lo cual convendría que se situara claramente por encima de esos intereses particulares. Esto le podría resultar más fácil a una persona procedente de un organismo internacional, sobre todo si tiene algún lazo con el país en el que va a operar la red, aunque esto no sea una condición sine qua non. En cambio, sí es una condición sine qua non para ocupar el cargo tener profundo interés por la comunicación y un gran talento como negociador, y ser capaz de incitar a los demás a participar en la toma de decisiones colectivas.

Sin embargo, es cierto que no es fácil hacer participar a la gente sin ofrecerle algún tipo de incentivo financiero. Se dará solución a este problema haciendo que los usuarios se sientan implicados en una acción prioritaria para todo el país y en una búsqueda permanente de transparencia. Pero lograr esa transparencia supone un volumen de trabajo (convocar con frecuencia grandes reuniones, reproducir y difundir informaciones) difícil de asumir sin la ayuda del correo electrónico. Si se tuviera que volver a empezar, los comités coordinadores de las redes peruana y dominicana tendrían que pensar en crear un dispositivo de boletín electrónico, desde la propia fase de concepción, que permitiera a la vez difundir información permanente e iniciar el proceso de enseñanza de las técnicas telemáticas. Del mismo modo, es primordial brindar cuanto antes acceso a la red a quienes ocupan los puestos clave en el desarrollo de la misma.

Es sumamente importante dejar siempre la puerta abierta a nuevos participantes potenciales, dado que todas las personas implicadas en la red son benévolas y, por lo tanto, su voluntad de participación puede variar a lo largo del tiempo, como se sabe por experiencia. Lo esencial es mantener siempre un número suficiente de participantes.

7.4.2 Un buen equilibrio entre las personas y las instituciones

Por definición, las personas son esenciales en el proceso de creación de un grupo de usuarios, pero también las instituciones constituyen un elemento ineludible para alcanzar buenos resultados. Por ello, conviene contar con personas capaces de conciliar el punto de vista del usuario final y el institucional, y de representar oficialmente, en el momento oportuno, a las instituciones de las cuales dependen. No habría que dejar de lado sectores institucionales enteros por falta de personas interesadas en el proyecto. Al fin y al cabo, la clave es contar con apoyo oficial por parte de las instituciones y, al mismo tiempo, una metodología basada en el usuario. Concretamente, en el caso de la Red Científica Dominicana, se les solicitó a los 25 rectores, directores y administradores de las instituciones fundadoras de la asociación que aprobaran oficialmente los estatutos de la asociación y designaran a un representante (22 de ellos respondieron favorablemente).

7.4.3 Una actitud federativa reflejada en los hechos

En la medida de lo posible, habría que tratar de identificar y sumar al proyecto a todas las personas que ya han intentado construir redes en el país del que se trate para unir sus esfuerzos en un proyecto nacional común.

Ya se ha visto que, en América Latina, se ve a veces una actitud centralista que provoca una tendencia natural hacia la multiplicación de soluciones a nivel nacional, lo cual produce inevitablemente ciertas tensiones.

Ahora bien, la diferencia entre la actitud centralista y la actitud federalista es fundamental, aunque sea muy difícil decir desde afuera quién responde a una o a otra. El centralista querrá imponer su propia solución y tratar de eliminar las de sus oponentes. El federalista querrá reunir las distintas soluciones potenciales y preservar, en la medida de lo posible, la originalidad de cada una.

No tiene sentido entrar en polémica sobre este asunto. Nosotros recomendamos mantener una actitud coherente a lo largo del plan de acción:

negociar con las otras propuestas para intentar federar las diferentes propuestas,

si resulta, integrar, y no asimilar, la originalidad de cada una (y, por supuesto, la de cada persona),

si no resulta, mantener en los hechos una actitud de cooperación y transparencia con la competencia.

 

La meta es satisfacer al mayor número de usuarios, para lo cual se debe respetar cada una de las opciones que persiguen este objetivo.

 

Aunque a veces parezca difícil de entender en países de escasos recursos, cuando coexisten varias opciones, el que en definitiva tiene la respuesta es el usuario.

 

Recordemos que, al fin y al cabo, la satisfacción del usuario es la medida del proyecto, y no las alianzas políticas a nivel nacional o internacional.

 

7.4.4 Una participación eficaz de los diseñadores de red del país que residen en el extranjero y que tienen acceso a redes

No hay que dejar de lado a los investigadores nacionales residentes en el extranjero. Estos pueden ayudar a instaurar el tráfico de comunicaciones durante la etapa inicial de utilización, asistir a los nuevos diseñadores desde sus países de residencia y, más tarde, canalizar el flujo de intercambios cooperativos. Es natural que los nuevos usuarios se sientan un poco incómodos utilizando una nueva herramienta de comunicación y la mejor manera de iniciar el proceso de aprendizaje es uitlizar las listas de distribución nacionales de carácter cultural que incluyan a los residentes en el extranjero. Así se logrará generar un mecanismo natural y progresivo con posibilidades de mantener contactos directos. Se recomienda elaborar y publicar directorios de usuarios desde el principio.

7.4.5 Cooperación Sur-Sur

La cooperación interregional y, en general, la cooperación Sur-Sur pueden dar excelentes resultados y brindan muchas oportunidades de llevar a cabo acciones ventajosas para todas las partes, dándole a cada una la posibilidad de valorar los logros alcanzados.

VIII - CONCLUSION

Esperamos que este artículo quede desactualizado en unos pocos años, cuando en todos los países un amplio número de usuarios tengan acceso a las redes de investigación. A los diseñadores de redes se les presentarán entonces nuevos desafíos para satisfacer aún más a los usuarios:

mejorar las interfaces de usuario,

seguir desarrollando la tecnología,

desarrollar aplicaciones,

actualizar directorios,

brindar buena capacitación y asistencia al usuario,

participar en la integración regional,

etc.

REFERENCIAS

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3. Pimienta, D. "Latin American and Caribbean, networking perspectives", Internet Society News, Vol.1, N°1, p. 8, Invierno de 1992.

4. Chukwudozie Ezigbalike, I. y Ochuodho, Shem J. E-Mail for Developing Countries - What they never tell you about it, ponencia presentada en la AITEC South Conference, Harare, Noviembre de 1991.

5. Diversos artículos relacionados con las redes de investigación en mayor o menor medida y publicados en Calidad, Tecnología y Globalización en la Educación Superior Latinoamericana, UNESCO/CRESALC, Julio de 1992, entre los cuales cabe señalar:

5.1. Silvio, J. F. "Dimensión tecnológica de la calidad en la educación superior", pp. 9-59

5.2. Cartier, M. "Un nuevo modelo de acceso al conocimiento", pp. 119-157

5.3. Cloutier, J. "EMEREC, la comunicación audio-scripto-visual y la telemediática", pp. 159-173

5.4. Casas Armengol, M. "Calidad y tecnología informática en la educación superior latinoamericana", pp. 177-222

5.5. Pimienta, D. "Integrar la comunidad académica latinoamericana: un desafío para las redes telemáticas", pp. 331-367

5.6. E. Richards, "Nuevas tecnologías e integración académica en América Central: experiencia de la red universitaria centroamericana de información científica (REDCSUCA), pp. 379-388

5.7. Loran Santos, R. y Perez Colon, R. "La red CUNET y la integración académica en el Caribe", pp. 389-396

5.8. Lanfranco, S. "Uso de redes electrónicas y cooperación hemisférica en la educación superior", pp. 397-414

5.9. Utsumi, T. "Hacia una Universidad Global Electrónica Latinoamericana", pp. 417-442

5.10. Liendo, P. "Un modelo conceptual para el análisis del mercado potencial de servicios telemáticos", pp. 493-512

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11. Academia de Ciencias de América Latina (ACAL). Encuesta para el Diagnóstico de la situación de la investigación en América Latina y el Caribe", 1991.

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16. Renaud, P. "RIO : un Réseau Inter-tropical d'Ordinateurs pour la recherche en coopération", Orstom Actualités, N° 34, 1992.

AGRADECIMIENTO

El presente artículo es una síntesis de la tarea llevada a cabo durante unos cuantos años por el autor y un equipo de profesionales. Varias personas han contribuido con sus ideas directa o indirectamente para conceptualizar el modelo REDALC, y en el tema particular del presente artículo, especialmente José Soriano, actual Director de la Red Científica Peruana.

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